jueves, 4 de julio de 2013

Desahucios


Y cómo conducirme en tu ausencia.

Si quise seguirte hasta tu mar
y esconderme en tu camisa;
divisar a través de tus ojos 
nebulosas solitarias
hasta quedar cegada por ese sol
que tantas promesas inventó.

Pero sólo tuvimos un verso
como alegoría
del roce de una piel que no fue la nuestra;
de unos labios que nunca probé.

Porque levaste anclas
y no dejas que te alcance.

Tienes detenidas
las agujas de mi esfera.


© Juana Fuentes


No hay comentarios:

Publicar un comentario